En la práctica privada me gusta trabajar la odontopediatría, ya que considero que en esta carrera es fundamental enfocarse a un solo ámbito, porque así le estaremos brindando al paciente una mejor calidad en sus tratamientos.
Los niños son muy exigentes y requieren de tratamientos que se realicen de manera rápida y poco traumática. Considerando esto, me gusta actualizarme para conocer lo más reciente en materiales, instrumental y técnicas para aplicarlos en ellos, y tengan una buena experiencia con el dentista.
Cuando tomo un caso, me tomo el tiempo necesario para diagnosticar correctamente y planificiar los tratamientos que se van a realizar. Los padres conocen desde un inicio, qué se le va a realizar al niño, para que puedan planificar las citas y los pagos con anticipación.
Mi trabajo no sólo se basa en tratar las enfermedades o lesiones que ya están presentes en la boca de los niños; de hecho, mi prioridad es la prevención. Ya que de esta manera, los pequeños aprenden a generar hábitos saludables que serán de mucha ayuda en la edad adulta.